La cuesta de febrero.

[Francisco Escobar Bravo]

La cuesta de febrero es empinada.
Los dandis sin dinero en el bolsillo
se comen cual manjar un bocadillo.
Y muchos hay también que comen nada.

Se acuestan sin cenar y allá­, en la almohada,
soñar con sabroso solomillo
es truco que bien mata el gusanillo
y dicen que su tripa está estregada.

El caso es presumir ante la gente,
tapando las miserias de su vida;
fingir que se es magnate e, indolente,

no darle ni valor a la comida.
Si luego no se puede hincar el diente
se vuelve uno a acostar y el hambre olvida.

[Antonia Pérez Garcí­a]

¡Hola don Francisco!...¿ha visto los programas?...
los poetas tenemos una ventaja, la de poder decir lo que queremos
de este mundo incompatible.
Saludos de Antonia.

[Francisco Escobar Bravo]

Algo de ellos he visto, estimada Antonia, pero no todo lo que quisiera haber hecho.
Se ha puesto enferma una compañera y me han "pedido" que la sustituya y estoy llegando a casa a estas horas, las 21.10. Y también me "rogaron" que trabajase el sábado entero y domingo y lunes, a pesar de ser mis dí­as libres.
Y todo para ganar una miseria.
Eso es lo que me inspiró este soneto: El ver como, a pesar de cómo está la vida, hay gente que finge y gasta más de lo que puede en su afán de aparentar que siguen siendo ricos.
Gracias por su lectura, amiga mía. Se lo agradezco sinceramente.
Saludos cordialísimos.
Paco