Los pasos en el espejo

Responder
A. Elisa Lattke V.
Mensajes: 786
Registrado: Lun Jun 11, 2007 9:50 pm
Ubicación: Madrid (Esp)
Contactar:

Los pasos en el espejo

Mensaje por A. Elisa Lattke V. »

Los pasos en el espejo

"La poesía no tiene tiempo, el que la lee la rescata, la hace presente y luego la regresa a su eternidad."
De Doménico Cieri Estrada.

Querido Lector, te contaré un cuento de verdad:

Una vez hace unas cuantas décadas, al acostarme miré un espejo que había frente a mi cama. -Desde entonces no quiero saber mucho de ellos, no suelo verme demasiado en los espejos y, si lo hago, es por el día:
Esto que te voy a contar no es un cuento, es solo una parte de muchas ocasiones más... Por lo tanto este relato es verdadero, puedes rebatirlo y darme esas teorías relacionadas con los espejos, leyendas, cuentos y demás, pero no me valen. Me está prohibido mentir.

Te cuento lo ocurrido.

Todo parecía normal donde me encontraba en la semipenumbra de mi habitación, iluminada por los focos de la vecindad donde llegaba parte de la luz exterior. Mi posición en la cama, ya acostada, para nada reflejaba mi imagen en el espejo y menos la cama donde me encontraba. Veía perfectamente el espejo, uno de esos que se colocan por encima de un pequeño comodín de cajones. Pero al sentir un cierto sonido de paso me incorperé un poco para escuchar de dónde procedían. Para mi sorpresa después de un rato a la escucha, pude darme cuenta que su sonido me llegaba desde el espejo. Era muy claro, lejano e imperceptible que parecía tener 'vida' real, alguien caminaba pero dentro del espejo. El sonido de los pasos lo percibía a lo lejos procedente del mismo y, empezaba a sentirse cada vez más cercano... Un sonido así de pasos es muy conocido, no nos podemos confundir.

Tragué saliva pensando que era cosa de mis oídos, y no era así, ¡el sonido o los pasos venían desde dentro del espejo! Al mirar el espejo me di cuenta que se reflejaba un largo pasillo, que por un momento pensé que era el de "La Eternida"(¡ignoró por qué pense en ese momento así! Pero creo que no lo ignoraba del todo, no sé si me entendéis). Recordé que algunos escritores hablaban de ello y que algunos pintores así habían dibujado "El camino a la Eterndad" como un largo pasillo -que seguramente conocemos todos o lo recordemos y que no se nos olvida-, pero que no tiene fin. Es claro, derecho, se pierde en la lejanía pero angustia por lo interminable...Entonces caí en cuenta que... ¡era yo quien me dirigía por el mismo! Pues el sonido de mis pasos se alejaba de nuevo cada vez más y más..., más allá... ¡Pero era yo misma quien lo miraba y lo escuchaba desde mi posición en la cama, ligeramente incorporada sobre los codos.

Sorprendida ante lo que percibía estando consciente, como también sabía que no estaba sola en ese lecho. Me acompañaba el padre de mis hijos que dormía a mi lado, no quise despertarle; seguro que no hubiese escuchado nada y hubiese pasado un mal rato. Entonces, me acomodé un poco mejor para seguír a la escucha. ¡Para qué llamarle! -me dije-... Hubiese dicho que estaba soñando y talvez, me hubiese perdido de ver lo que que me estaba pasando en ese momento. Pues no era una pesadilla ni tampoco un sueño.

Seguí con la mirada puesta en el espejo y la visión y el sonido me levantaban la curiosidad, pero no me asustaban en ese momento. Decidí incorporame un poco más sobre la almohada, quería estar cómoda, no perderme nada de lo que me pasaba.

Y, ocurrió algo diferente al desaparecer el sonido de los pasos que iban hacia ese fondo interminable Me pregunté conscientemente: ¿o, acaso, menguan el sonido en lo que aparentemente a mi percepción llega desde ese fondo del espejo, como de pasos alejándose? Parecía que iban... que estaban muy lejos y apenas se sentían. Pero de un momento a otro volvían en sentido contrario y, de nuevo los escuchaba de vuelta, cada vez más claros su sonido, cada vez más cerca sobre una superficie taconeando una superficie sonora como un suelo de cristal; además se sentía que llevaban calzado de tacón por la sonoridad y la firmeza de la pisada sobre una superficie dura. Miré instintivamente el reloj y pude ver que eran las 02:15 a.m. Notaba que los pasos estaban viniendo al contrario y cada vez más estaban cercanos. Llegaban sin parar directos hacia el mismo marco del espejo y el camino era de luz. No era la luz del exterior la que reflejaba en el espejo, porque observé que no le daba ningún rayo directo proveniente del la calle, pero no se veía ninguna presencia que los generara. Sin embargo sabía... ¡que era yo misma la que me alejaba y volvía de nuevo!
Entonces fue cuando me entró un poco de pánico y no pude resistir, porque la espera era tensa, difícil, imposible... ¡No era capaz de esperar lo que podría suceder en cualquier instante! Pensé: ¡No, no, ahora no es el momento! Puedo pero no debo porque mis huellas físicas serían absorbidas difinitivamente trás el espejo, ya no volveré... ¡Es que vengo yo misma a por mí!
...

Aún fui valiente y esperé unos segundos al escuchar que los pasos se detuvieron, como si intentara abrir 'una puerta' que llevaba a mí misma... Sentí que se movía a punto de abrirse, era el típico sonido de un pomo que gira o una manilla que se baja... ¡Y yo seguía mirando el espejo por unos segundos más, angustiada! Pero no pude más, era imposible aguantar lo que pudo suceder de haber tenido los ojos abiertos (¡lo sabía!)... y, los cerré institivamente, pues estaba segura que era mi mirada la que proyectaba un deseo (...) Di un grito de angustia despertando a mi pareja. Después de ello no pude reprimir el llanto. ¡Quién podría creerme lo que me había ocurrido! Entonces dije que había tenido una pesadilla.

...

¿Sabes lo que había pedido, Lector? Eso que tú y yo, más o menos, deseamos cuando las cosas no nos salen bien y queremos terminar de una vez. Aprendí una lección nueva. Desde ese entonces aprendí a valorar mucho más lo que tenía a mi lado, como que valía la pena no decidir tan pronto mi vuelta al más allá, estoy segura que no hubiese dejado huellas de mi marcha. Porque es posible que nosotros mismos planifiquemos nuestro paso por el mundo, somos energía útil que se entretiene con un sueño llamado Vida.
Pero esto relato real puede que sea un cuento que te he contado hace un momento... ¿O será verdad? ...


*Querido Lector. Me llaman "la ranita azul". Dicen que "soy mágica". Yo digo que 'la magia' es un estado hinóptico muy necesario a los seres humanos, es ilusión, ayuda a sentirse feliz por ratos. La mía vino conmigo, es mi problema por momentos pero me regala otros buenos para aprender de la vida real. Lo que te he contado fue así de cierto.

Ya sé que hay muchas leyendas sobre espejos, empezando por el del cuento de: "Alicia en el País de las Maravillas", pero este es una parte de las mías. ¿Sabes? Si mantengo los ojos abiertos delante del espejo no estaría contándote lo ocurrido. ¿Quién es el valiente que contradice su presente? Sobrevivir a todo lo que no es de nuestro agrado, es siempre parte de nuestra entereza, tesón o valentía, porque vivir en este mundo es cosa de valientes. La obra personal si no es la correcta o no se está contento con ella, necesita a diario el cincel, quitar aquí y allá...modificándola para conseguir algo aceptable y yo, lo hago dando amor. Ah, me cuesta llevar calzado de tacón sobre una superficie dura. Y, la vida propia, es como un trabajo artesano que dura la de cada uno en su paso por el mundo, así que merece la pena conseguir hacer con ella un buen acabado final, que se refleje en 'su espejo'. Un beso y gracias por leerme.



Elisa Lattke
* Los sueños son deseos sin tiempo, el que los desea no los rescata, porque están hechos de eternidad; y ellos nos serán devueltos cuando los penetramos de nuevo. (Ranita)
_________________

*Tengo sed... y filtro mis palabras para bebérmelas en silencio.(AlattkeVa)

Miembro de CiÑE (Círculo independiente Ñ de escritores, http://www.circuloindependiente.net)

Antonia Pérez Garcí­a
Site Admin
Mensajes: 4129
Registrado: Sab May 12, 2007 11:45 am
Contactar:

A ELISA LATTKE

Mensaje por Antonia Pérez Garcí­a »

¡Hola Elisa!...Fantástico cuento, el fantasma de la creación
se hace carne en el subconciente...y que así­ sea.
Un beso de Antonia.
Un poema... ¡ Que mágica manera de decir que estoy presente !

http://webs.ono.com/antoniapgc

Maite Martin-Camuñas
Mensajes: 223
Registrado: Mié Oct 03, 2007 7:50 am
Contactar:

Mensaje por Maite Martin-Camuñas »

Elisa, me ha gustado mucho tu relato y veo que tienes una pequeña fijación con los espejos, debo decir que yo a veces tambien los rehuyo y no sólo por lo que puede haber del otro lado...
Un cordial abrazo
La PALABRA es la que nos hace libres,
no la amordaces.
(Maite Martin-Camuñas)

Imagen

Visita mi blog:
http://elrincondenudaajila.blogspot.com/

A. Elisa Lattke V.
Mensajes: 786
Registrado: Lun Jun 11, 2007 9:50 pm
Ubicación: Madrid (Esp)
Contactar:

Contesto

Mensaje por A. Elisa Lattke V. »

Queridas compañeras de aficiones:

NO es que se tenga fijación por los espejos es que los espejos se fijan en nosotros, de la misma forma que el agua sirve de espejo a las espíritus de la naturaleza cuando se reflejan en ella.

Una vez mirándo el agua de un remanso del río y desde una gran peña, de la que nos tirábamos mis hermanos y yo, a un gran charco de tres metros de profundidad, nos dimos cuenta que en el fondo habían unos ojos que nos miraban. Llamamos a nuestra abuela y ella sin asomarse a la peña nos dijo: "¡Ah, pillastres de niños, eso es normal, quien lo ve debe pedir un deseo y atravesará el tiempo del no tiempo!". Sin entender lo que nos decía nos cogimos de las manos y le dijimos a mi abuelita, a la que llamábamos 'maga': ¡Maga, entonces queremos que vivas muchso años más, hasta la vuelta! ...Nos dejamos caer al agua nadando hasta el fondo de la misma donde veíamos lo que nos parecía unos ojos. Nos dimos cuenta que los ojos que nos veían eran los ojos de mi abuela, pero no se veía más nada. Ella nos dijo que "era su tiempo que nos miraba desde el amor"... Cuando volvimos a la superficie, mi abuela estaba mirándonos muy seria y nos dijo: "No es bueno descubrir el tiempo ajeno, pero los tres sumáis el tiempo que voy a vivir más, gracias hijos." Nuestras edades comprendían: 15,14,9=38 años. Ella tenía cuarenta y uno, murió de 79 años. Pero como era así de 'mágica', no nos pareció nunca extraño.
Ya de mayores nos reuníamos los hermanos y comentábamos estas cosas extrañas de nuestras vidas, las que a todos nos pasaban; algunas veces de lo terriblemente raras o miedosas nos partimos de la risa nerviosos, no parando de réir, "¡para qué echarle cabeza si no las podemos explicar", decía nuestra madre que nos acompañaba por entonces. Ya de mayores podemos dormirnos sin tener un un ojo abierto y el otro cerrado. :lol:
Tuve una infancia mágica. El monte, la selva, el río, los animales peligrosos, todo eso le daba un encanto especial a nuestra pequeña realidad 'salvaje'. Eso es todo. Un cordial saludo amigo. Elisa.
*Tengo sed... y filtro mis palabras para bebérmelas en silencio.(AlattkeVa)

Miembro de CiÑE (Círculo independiente Ñ de escritores, http://www.circuloindependiente.net)

Responder