Noche de luto y tragedia

[Francisco Escobar Bravo]

Noche de luto y tragedia
en la capital de España.
Yacen, cual muñecos rotos,
los cuerpos de tres muchachas.
En vez de fiesta y jolgorio,
como todos esperaban,
sin conocer el culpable,
ha ocurrido una desgracia.
No hay risas en el ambiente,
cesaron las carcajadas,
dando paso al triste llanto.
Todo dolor, todo lágrimas.
Madrid entero pregunta
quién habrá sido el canalla
que ha permitido el desastre,
la ciudad de rabia clama
aunque la vida prosiga
al alumbrar la mañana.
Se exigen explicaciones:
- ¿Cómo pudo una bengala
ser metida de matute?
¿No había en la sala guardias? -.
Y todo por más dinero,
por enriquecer sus arcas.
¡Presto confunda el Demonio
al que buscó tal ganancia!
¡Negociantes sin escrúpulos,
políticos sin entrañas,
ante Dios rendiréis cuentas
pues de ese Juez nadie escapa!
Han enterrado a las muertas,
sus tres familias reclaman.
En vano, pronto el olvido
hará que pasemos página,
hablaremos de otras cosas
y aquí no ha pasado nada.

[Marí­a de león]

Un excelente poema con toral veracidad
...los culpables los de siempre
la abaricia, y esa desesperación
por divertirse sin pensar
en consecuencias y hacinamiento.
Mis pensamientos son distintos
sobre tumultos, nada mejor
que estarse en casa.
Un saludito afectuoso.
María.

[Francisco Escobar Bravo]

Cuando fuimos jóvenes raro es que no saliésemos alguna noche de fiesta, estimada María. Pero entonces no se consumía tanto alcohol ni mucho menos drogas de cualquier clase. Y existía un respeto por los demás que actualmente creo que en la mayoría de los casos no existe.
Esos aspectos, unidos a la avaricia de unos organizadores sin entrañas y de unos políticos corruptos, llegan a originar sucesos como éste. Y no será el último, por mucho que digan. Ya veremos que sucede en Nochevieja si Dios no lo impide, pero de la avaricia de quienes nos gobiernan y de los que nos han gobernado puede esperarse cualquier cosa.
Muchas gracias por sus amables palabras y por su tiempo, amiga mía.
Muchísimos besos.
Francisco

[Antonia Pérez Garcí­a]

¡Y es así ; como usted lo escribe!
pero triste el tema, triste para los padres,
aunque ya se sabe que la noche no tiene los
hechos claros y los jóvenes se creen que la
suerte está con ellos , así están las cosas.
Un abrazo.
Antonia.

[Francisco Escobar Bravo]

Cuando somos jóvenes no pensamos que nos pueda suceder nada, estimada Antonia. Y a muchos, por suerte, no nos ocurre. Pero hay muchos que se quedan en el camino y es una verdadera lástima.
Aunque también le digo que hay personas mayores que siguen cometiendo locuras a pesar de su edad y circulan a más de 200 Km/hora en sus potentes coches y estando bebidos.
Así que al final tenemos que apelar a aquello tan manido de que cada uno tiene su Destino, ya sea joven o viejo. Pero hay veces que el Destino lo trazamos nosotros mismos, muchas.
Gracias una vez más por su presencia en mis versos, amiga mía. Le quedo muy agradecido.
Muchísimos besos.
Francisco