se escuchó la voz de un libro muy antiguo.
Ya no me queda nada, creo que es el final,
estoy muriendo por causa de otra realidad.
Mis páginas son mis entrañas, ahora sin alimento
pues nadie me lee, dicen que estoy muy viejo.
Mi rostro, ajado por el tiempo despiadado,
Es una portada gris que hiciera, un artista muerto.
Mis letras, son la sabia de mis venas
donde se esconden los secretos de la vida.
La substancia que en un tiempo,
Alimentara a muchas mentes desnutridas.
Hoy me abandonan en obscuras bibliotecas,
argumentan que los libros digitales son la moda.
Yo siento que me extingo, pero quiero;
Dejar un mensaje, a quienes recorrieron mis entrañas.
Un libro es una fuente que hace del hombre simple,
Un gigante lleno de saber y sentimientos libres.
La mente humana se alimenta de sueños eficaces,
pensamientos dignos de mentes brillantes.
Soy el libro de siempre, aún de cara digital,
aún que yo muera otros vendrán a relevarme.
Soy amante de la sabiduría y a ella me entrego,
Quiero más amigos, por favor ¡ESTOY AQUÍ!