Me atrae esa mágica luz del atardecer
y me atre el murmullo de este cauce,
como un beso rozando mis mejillas,
corre fresca y mimada esta agua
que a mi sed entera va a calmar.
Se enreda entre mis labios, dulce amor.
Murmullo de selva atardecida
y el fino rumor del viento jugetón,
entrelaza la armonía de mis ansias.
Un rayo de luz quien lo intercala...
hasta el vuelo de la dicha, en locura convertida,
Me acompañan todos los duendes
de la magia, entre esa luz atardecida.
María.