Querida amiga, no me considero ningún maestro sino alumno aventajado de alguno de ellos.
Llámeme, simplemente, poeta. Es como me gusta y lo que realmente soy.
Muchas gracias por su presencia en mis versos y por esos desmesurados elogios. Le quedo muy agradecido.
Muchísimos besos.
Francisco
La gloria es del que la busca; la suerte de quien la encuentra.
¡Hola don Francisco!...cómo lo trata el tiempo...
por aquí está bueno en temperatura,
leí que estuvo enfermo, cuídese que a nuestra
edad la salud lo es todo. Muy buen trabajo
y no se pierda del foro,
apreciamos mucho a los buenos poetas.
Un abrazo.
Antonia.
Un poema... ¡ Que mágica manera de decir que estoy presente !
Efectivamente, querida amiga, me han tratado mediante radioterapia de un cáncer de próstata muy incipiente y por fortuna han erradicado todas las células malignas según los últimos análisis. Parece que es una enfermedad genética de mi familia, ya que mi hermano mayor la padeció justamente con mi misma edad. Con la diferencia de que él tuvo que pasar por el quirófano y yo solamente por el acelerador líneal, incruentamente. Es que en 18 años que nos llevamos ha avanzado mucho ese sector de la Medicina, ya sabe.
Y por lo demás, me sobran unos cuantos kilos. Pero, como soy de buen comer, no me los logro quitar de encima. Además, ya sabe que los gorditos solemos tener mejor humor que los que hacen dieta.
Por supuesto que continuaré colaborando con usted, lo que sucede es que ahora escribo mucho menos que cuando estaba en activo. Se ve que la jubilación, dos años ya, me ha hecho vaguear.
Muchas gracias por su interés y le agradezco realmente su interés y su tiempo.
En Madrid hace frío, pero supongo que menos que por su tierra. O llueve mucho menos, aunque falta hacía.
Muchísimos besos.
Francisco
La gloria es del que la busca; la suerte de quien la encuentra.
Amigo poeta no dude que destaca
dentro de la poesía, pues
escribe usted de maravilla,
puesto que leyendo se aprende.
Un cariñoso abrazo desde mi Necochea-Argentina.
María Inés.
Muchas gracias de nuevo, María Inés. Es un honor para mí tenerla en mis versos, amiga.
Le quedo muy agradecido y le ruego me envíe un poquito de ese sol que ahora les sobra a ustedes y a nosotros nos comienza a faltar.
La verdad es que me gusta más el verano que el invierno. ¿Se me nota mucho?
No hablo de la primavera ni del otoño porque en Madrid apenas si existen, pasamos del frío al calor rápidamente sin gozar de esas otras dos estaciones.
Muchísimos besos, querida amiga.
Francisco
La gloria es del que la busca; la suerte de quien la encuentra.