soy el viento

[Antonia Pérez Garcí­a]

Sigo a Julian..

Cuentos a montones
todos los derrochamos
cuando con los amigos
todos nos juntamos.
Y si la luna está llena
entre la hierba rodamos.
Que bueno que sopla el viento
si nó nos quemamos...

[Esther Luscinda Melcón]

Sigo a Antonia

Sinó nos quemamos,
nos quema esa llama
que nunca apagamos.
arde en los ensueños
tan bellos de antaño.
cuando los juglares
al viento cantaron...

saluda Esther Luscinda

[Antonia Pérez Garcí­a]

Sigo a Esther...que dice:
Al viento cantaron
las chicharras en verano
y, vieras vos que calor...
para el dí­a anunciaban
de esto sabe Liliana
que las debe padecer...
y el dí­a que no chillaban
seguro que lloverí­a.

[Olga San Isidro]

Seguro que lloverí­a
Si alguna vez nos juntáramos,
Para así­ pasar el tiempo
Contando cuentos y reclamos.

[Antonia Pérez Garcí­a]

Sigo a Olguita, que dice:
Contando cuentos y reclamos.
La idea está rebuena..
pero quien nos callarí­a
si tenemos que contarnos
mil cosas en un dí­a.

[Esther Luscinda Melcón]

con Antonia


Mil cosas en un dí­a
tenemos que contar
pero bien calladitas,
está prohibido hablar.
Deja que el viento diga
que a mi me viene a amar...

Saluda Esther Luscinda

[Julian Lopez]

Esther Te amara el viento
y con su amor
creceran flores en el desierto

[Esther Luscinda Melcón]

Sigo a Julian

Crecerán flores en el desierto
si es que Julián lo pide,
porque él ama mucho a Gaia.
Su amor es libre...
La quiere mas que a nada
de amor sublime.

Saluda Esther Luscinda

[Antonia Pérez Garcí­a]

Sigo a Esther y a Julian...
Pués los dos hablan el mismo idioma,
los ama el viento, de amor sublime,
y yo bajo por la corriente,
he perdido sin querer un pendiente.
Le dije al viento que me lo encuentre
para llevarlo a vuestro encuentro.
Al amor lo dejo por ser incierto.

[Esther Luscinda Melcón]

sigo con Antonia

al amor lo dejo por incierto.
Aunque amar a Gaia es sublime,
es un amor que redime
y hace fértil el desierto,
con agua, lluvia y con viento
los arenales dan flores,
cardos azules, no llores
que no lastiman tus dedos,
solo dicen un te quiero
que te invade el pensamiento...

saluda Esther Luscinda