Hallábame recostada en un árbol
Cerca del cauce de un río.
Y no sé si fue un sueño o de verdad me ocurrió.
Se me presentó una Ondina que dijo que se llamaba
Turquesa, y me preguntó si conocía la leyenda del árbol sobre el que me recostaba...
![Imagen](http://img159.imageshack.us/img159/2585/449pxwillowvp31lp1.jpg)
Negué con la cabeza, aún un poco aturdida por la aparición.
Ella comenzó a narrar:
Hace ya mucho tiempo, mas del que podemos imaginar.
Había dos amantes que se amaban sobre todas las cosas.
Ella se llamaba Zoa y él Erbión.
El mago Malaquías, estaba también enamorado de Zoa. Y por eso sufría enormes celos de Erbión.
Cómo no encontraba la forma de que Zoa le amara a él.
Tramó un sórdido plan.
Creó un hechizo invencible y convirtió a Erbión en un rió.
![Imagen](http://img88.imageshack.us/img88/1104/n0453p1kj5.jpg)
Cuando Zoa lo supo se fue corriendo hasta el rió y allí lloró y lloró desconsoladamente.
Estuvo así durante días hasta que de sus piernas comenzaron a salir raíces y sus largos cabellos se fueron troncando en largas ramas que acariciaban la corriente del rió.
La reina de las hadas, Maravilla, se apiadó de ella y la convirtió en un maravilloso árbol.
Se convirtió en un Sauce y sus largas ramas acariciaban las aguas de lo que antes fue su amor y así, siempre los sauces buscan un cauce donde medrar, para hallarse cerca de su amado cauce.
Y llora y lo hará eternamente a la orilla de los cauces, esperando que un hada buena los convierta de nuevo en humanos, y mientras tanto se aman acariciando una con sus ramas y el otro con la frescura de sus aguas.