PAISAJE NOCTURNO

[Orlando Santana Cabrera]

PAISAJE NOCTURNO
(A...)

Tiene aquel monte la forma de un toro,
le presta la luna sus cuernos de plata.

Tiene la noche dormidas tristezas
que despiertan temblando cuando llega el alba.

El viento ulula del frío que hace
y sopla con fuerza quebrando las ramas.

Allá abajo se ve encendida la bahía,
allá arriba se contempla de blanco las montañas.

Sobre la hoja de un nenúfar en el estanque
van a la deriva croando dos ranas.

¡Ya una vez pasé por esta senda,
llevaba roto el corazón por una daga!

Recuerdo del amor aquellos sinsabores
y silbo al tiempo que un cuervo grazna.

Se inclinan las palmeras cuando paso,
se quedan murmurando, se quedan asombradas.

¡Cómo puede un hombre andar silbando
traspasado el corazón por una espada!

Se apagan las bombillas del techo del cielo.
¡Un hombre va llorando en la alborada!...

[Esther Luscinda Melcón]

Las tristezas que duerman,
no las despiertes
deja al alba risueña
que se amanece.

Las ranas del nenufar
encima de esa hoja
están croa que croa
pero son muy dichosas.

Saca esa daga Orlando
y tírala muy lejos,
rompe tu corazón
y no le da renuevos.

Y aunque la mar se inunde
y aunque se apague el cielo,
un hombre nunca llora.
¡Y en la alborada menos!


sigue amando a quien quieras Orlando
pero no llores. Mis saluditos Esther Luscinda

[Orlando Santana Cabrera]

Las tristezas que duerman,
no las despiertes
deja al alba risueña
que se amanece.

Las ranas del nenufar
encima de esa hoja
están croa que croa
pero son muy dichosas.

Saca esa daga Orlando
y tírala muy lejos,
rompe tu corazón
y no le da renuevos.

Y aunque la mar se inunde
y aunque se apague el cielo,
un hombre nunca llora.
¡Y en la alborada menos!


sigue amando a quien quieras Orlando
pero no llores. Mis saluditos Esther Luscinda

Jejeje... Se nota la agilidad de tu pluma contestando a mis poemas con otros poemas. ¡Gracias por tus sabios consejos, querida amiga, mil gracias y que tengas una muy feliz Navidad!... Aunque no estoy muy de acuerdo con eso de que los hombres nunca lloran, pues tenemos un corazón tan amoroso como el de las mujeres.... Eso sí, no se debe llorar jamás en la alborada... Un beso, linda santanderina. Orly.